Toxina botulínica
La inyección de toxina botulínica es la técnica estética más utilizada en el mundo. La rapidez de su tratamiento, seguridad y los rápidos resultados han convertido a esta técnica en uno de los mejores tratamientos frente al envejecimiento cutáneo.
Se trata de un tratamiento indoloro, no precisa de anestesia y los efectos son visibles desde la primera semana con una duración variable de 4 meses a un año.
¿Cómo actúa?
La toxina es un proteína que va a producr una relajación del músculo puesto que impide que el nervio le de la orden para que se contraiga. Una vez inyectado el producto en el mundo sculo, se une a las terminaciones nerviosas impidiendo que se libere acetilcolina que es el neurotransmisor que lleva a cabo la orden de contracción
¿Qué indicaciones tiene?
La toxina botulínica está indicada en la mejoría temporal ( desde 4 meses a 1 año) del aspecto de las líneas verticales del entrecejo ( glabela), patas de gallo y tratamiento del exceso de sudoración de las axilas de intensidad moderada a severa.